La Diputación de Girona, en coordinación con otras instituciones catalanas que promueven el turismo interior, recomiendan este verano una ruta por los valles del Ripollès, el valle de Camprodon y el de Ribes para descubrir tanto las joyas del románico del Pirineo, las actividades de escalada y de rutas a caballo como la cocina de montaña. La califican de “propuesta gastronómica de altura, que apuesta fuerte por el producto local y que se caracteriza por unos ingredientes únicos, como, por ejemplo, la carne de potro, la oveja ripollesa, la triunfa o las famosas galletas”.
En el marco de esta ruta, y siguiendo en el ámbito agroalimentario, se recomienda probar en la capital del Ripollès sus extraordinarios embutidos y la cerveza artesana Minera. Hace casi un siglo que la última vagoneta salió por la boca de la mina Juncadella, y 50 años que la explotación cerró definitivamente. Sorprendentemente se ha convertido, sin embargo, en la cuna de un proyecto de cerveza artesana que está triunfando en el territorio: la Minera. El objetivo de sus impulsores es divulgar la cultura de la cerveza artesana así como el patrimonio minero de Ogassa y Sant Joan de les Abadesses. Por este motivo, organizan regularmente visitas con cata para grupos en su obrador y caminatas en torno a las minas de Ogassa.